Albergue LaMorena

The reception by the receptionist was friendly and hospitable. The beds in the dormitory are in a cabin, which has a power outlet and lighting. You can close the cabin with a roller blind. It is very cozy to lie in there, but it does get warm. It looked very neat, the toilet and shower room was also neat and clean. There was also a hair dryer. Facilities for the pilgrims were fine. I ate the pilgrim menu with fellow pilgrims, which was particularly bad. It did not look attractive and was also not tasty. And the wine was not included in the price. A particularly bad price-quality ratio for the meal. Breakfast of a croissant with a glass of juice and coffee or tea was relatively expensive for a hostel.

Antes de nada, destacar el trato amable, cercano y profesional de todo su personal. Tras una buena etapa de marcha, es como entrar en un pequeño oasis todo son facilidades. Su menú sabroso y generoso; las habitaciones muy bien, grandes con buena cama para facilitar el descanso. La única pegar, por decir algo, fue el baño compartido en el ala donde nos alojamos y, sinceramente, eso no fue ningún problema. Solo me queda recomendar este lugar y pedir a que sigan así de bien en el trato al peregrino.

No recomiendo parar en este lugar a comer. La cestilla de pan tenía una rebanada dura y a otra le habían comido la miga. Pedimos dos platos de pasta al pesto. A los quince minutos nos informan que el pesto se ha terminado y que tenemos que pedir otra pasta. Pedimos la de espinacas con queso. Después de 20 minutos de espera aparece la camarera con dos platos, deja uno en nuestra mesa y se va con el segundo plato a otra mesa. Estupefacción, uno come y el otro mira. El tiempo pasa y no aparece el otro plato. Lo anulamos por la tardanza. A la hora de pagar nos cobran dos euros más por servicio de mesa, un euro por persona. Esto es legal? El único plato que nos pusieron estaba frío y la pasta pegada. Nos cobraron 11,90 euros por el plato. Todo un atraco. Sería porque eramos peregrinos? A quien quiera parar ahí a comer que se asegure que el pan está en condiciones y que pregunte si le van a cobrar por el servicio un euro por persona. Para denunciar en consumo este abuso al peregrino.