Hotel Alda Mercado de Zamora

La ubicación de este hotel es inmejorable, al igual que la amabilidad del personal de recepción. Las habitaciones son amplias aunque es muy difícil controlar la temperatura de las mismas. En cuanto al desayuno es escaso, tiene poca variedad de productos y un café muy mejorable.

El hotel es un edificio de estilo modernista del siglo XIX, con rincones elegantes y donde destaca su escalera y vidrieras. Esta muy bien situado, a unos 5 minutos andando de la Plaza Mayor. Dispone de garage, la entrada es algo estrecha pero las plazas son amplias y se puede reservar. Nuestra habitación era amplia, al igual que el cuarto de baño. Buen descanso. Estuvimos alojados en regimen de media pensión con menu cerrado, ya que ibamos con un grupo de Turismo Social. El servicio de cena fue impecable y la comida aceptable. Sin embargo el desayuno nos parecio demasiado austero y servido de una manera algo peculiar. Lo pasamos muy bien. En resumen, un buen hotel.

Al hotel le quedan muy grandes las 4*, le sobran por lo menos 3*. Los servicios, equipamiento y confort no son acordes ni están a la altura de 4*. No tiene servicio de bebidas ni en zonas comunes (Bar no funciona) ni máquinas de vending, ni minibar que funcione en habitaciones. Los colchones tienen montón de años sin renovar, son de muelles con escaso grosor, bastante hundidos por el uso y no permiten descansar ni conciliar el sueño, cuando te incorporas parece que te han dado una paliza. No hay teléfono en habitaciones ni disponen de servicio despertador. Pobre equipamiento de amenitis en baño, solo gel y champú. En armario-ropero solo 3 perchas para 2 personas. No hay bolsa para ropa sucia. Mobiliario y decoración anticuados para los tiempos que corren, necesita moderniz**** y renov****. Conclusión tanto mi familia como yo no volveremos a poner los pies allí y no lo recomiendo a nadie si no quieren llev**** un chasco.

Al hotel le sobran estrellas, solo tiene dos cosas buenas, la ubicación y la limpieza. Viajamos con media pensión. El desayuno tipo buffet solo tenía tostadas, croissant (con mal aspecto) jamón york y queso en lonchas, café y zumo (de bote). La cena solo se servía a las 20:30 y tipo rancho militar (plato único), si no te gustaba, te ibas a la cama sin cenar

El hotel tiene un encanto caduco como corresponde a su edad. Pero debería mejorar en algunos aspectos dado que es un hotel de 4 estrellas. Deberían cambiar la alfombra de las escaleras que está algo gastada. También nos resultó extraño que no hubiera una botella de agua en la nevera, ni una tetera e infusiones en la habitación. Máxime cuando la cafetería del hotel no funciona

Habitación bastante amplia tipo buhardilla con las ventanas en el techo inclinado. Dos camas individuales juntas. La calefacción en el lavabo estaba fuerte, y hacía calor, pero siendo invierno, no era un problema.

El hotel está bien en relación calidad-precio. Por el precio, no se puede pedir grandes comodidades y de lujos. Está bien situado con respecto sl centro, a pocos minutos andando y tiene parking. Varios comercios a su alrededor así como el mercado de abastos justo en frente.